La ciudad de Jacareí, en el estado de São Paulo, Brasil, amaneció con un aire distinto, como si sus calles —vestidas de historia, árboles y palmeras— supieran que alguien especial venía a recorrerlas no como turista, sino como futuro hijo adoptivo.
Hacia la 1:15 de la tarde, el Dr. José Benjamín Pérez Matos, acompañado de su esposa y una comitiva, hizo su primera parada en el imponente edificio de la Alcaldía (Prefeitura Municipal), el corazón palpitante del poder ejecutivo local.
Allí fue recibido por Lucas Torralbo, director de Comercio y Servicios de Jacareí, quien también se presentó como pastor y hombre de fe. A pesar de las barreras propias de la traducción, sus palabras reflejaron una sincera admiración por la prosperidad del ministerio del visitante, especialmente al conocer las actividades en las que ha logrado congregar multitudes. Manifestó además su entusiasmo y emoción ante la posibilidad de organizar, en un futuro cercano, una actividad pública en la ciudad.
Minutos después, y tras la llegada del alcalde Celso Florêncio, los alegres saludos protocolarios dieron paso al ingreso inmediato a su despacho privado. El espacio, sobrio y representativo, transmitía la seriedad del poder ejercido con responsabilidad. En ese marco, el Dr. José Benjamín reconoció la labor de quienes, elegidos por voto popular, trabajan en favor del pueblo, y subrayó la importancia de que los líderes busquen siempre la guía divina.
“Dios los guíe buscando sabiduría de lo alto, como la tuvo Daniel, en ese tiempo del rey Nabucodonosor. Para mí es una bendición poder estar frente a uno de los líderes que en este lugar está ministrando esta posición; por lo cual, le pido a Dios Su bendición sobre usted, para que le dirija en todo. Y gracias por la acogida y esta bienvenida que me han dado. Ya soy jacariense, así que ya es como si fuera mi casa”.
El alcalde no se quedó atrás. Le dio la bienvenida con afecto, no solo a él, sino a todos los que lo acompañaban. En sus palabras reconoció con gratitud la misión de la Iglesia como agente transformador.
“Para nosotros es un placer tenerlos aquí con nosotros. Conozco ese gran trabajo dentro de nuestra ciudad… —entonces ya eres ciudadano de Jacareí—. Siempre las puertas están abiertas para usted y todos los que lo acompañan”, concluyó con calidez.
La reunión culminó con una oración, serena y profunda, por parte del Dr. José Benjamín, quien elevó los nombres y las decisiones al Cielo. Pidió sabiduría, protección y paz, para que Jacareí no solo sea una ciudad entre tantas, sino un faro para el resto del país. Un abrazo sincero entre los dos líderes selló lo que las palabras ya habían sembrado.
Jacareí gana un hijo y un embajador
A pocos metros de distancia, el segundo acto aguardaba. La Câmara Municipal de Jacareí, sede del poder legislativo, recibió al doctor Pérez Matos a la 1:30 de la tarde, en el auditorio Vereador Djalma D’Avila Leal. Allí lo esperaba la concejal Maria Amélia, quien en ese momento ofrecía declaraciones al noticiero local TV Câmara:
“Como él venía a Brasil, inmediatamente colocamos esta propuesta para ser votada en casa. Todos los gobernadores aprobaron y hoy estamos aquí para hacer esta entrega simbólica, porque en su próxima visita a Brasil pretendemos hacer esta entrega oficial”.
La concejal no solo lo recibió con un abrazo efusivo al verlo llegar, sino que también le rindió un homenaje especial al incluir parte de su discurso en español —idioma que confesó aún no dominar— mientras dos de sus colegas tomaban asiento en la mesa principal junto a los invitados de honor.
“Lo preparamos con mucho cariño”, afirmó visiblemente emocionada al entregarle el título de Ciudadano Jacariense.
Luego, un regalo artesanal con la inscripción “Yo amo a Jacareí” arrancó una sonrisa amplia y sincera al homenajeado; y, finalmente, dos tazas artísticas: una ilustrada con paisajes turísticos y otra con imágenes del Museo de Antropología creadas por artesanos locales. Un pedazo de la ciudad, puesto literalmente en sus manos.
La respuesta no se hizo esperar. Con voz emocionada y firme, el doctor comentó:
“Agradezco la hospitalidad, la bienvenida y que me hayan otorgado el título de ciudadano jacariense. Y como honra lo llevaré, y van a experimentar que un jacariense esté recorriendo el mundo, poniendo en alto también a Jacareí… O sea, sería también un embajador de Jacareí en el mundo”.
La ceremonia cerró con una oración que citó el capítulo 6 del libro de Números, invocando la bendición de Dios sobre los líderes, la ciudad y sus habitantes, así como en el pasado fue puesta sobre Israel. Una súplica por discernimiento para quienes legislan, para que sus decisiones estén alineadas con el bien común y con el Cielo.
Al final, ante la prensa local, el Dr. José Benjamín resumió su sentir con una frase que unió identidad y gratitud:
“Ser ciudadano de una ciudad donde no se ha nacido es una alegría, porque hay un lugar más en donde uno puede familiarizarse con la cultura y todo lo correspondiente a esa ciudad. Me siento muy honrado de ser un jacariense”.
Así concluyó la visita a una ciudad que abrió sus puertas a un visitante que se convirtió en hijo. Desde sus 22 años, el Dr. Pérez Matos ha recorrido Brasil acompañando la Palabra de Dios, y hoy suma a Jacareí como un lugar que podrá llamar “hogar”.